jueves, agosto 11, 2005

Llegó realmente el hombre a la luna?

Un buen número de habitantes del planeta aún siguen dudando de que realmente los tripulantes de la misión Apolo XI pusieran su pie en la luna el 20 de julio de 1969. Aún a pesar de haber transcurrido más de treinta años las dudas persisten y los escépticos siguen en sus trece argumentando que sus dudas son razonables y que por el momento la NASA no ha podido aportar pruebas fehacientes de ese alucinaje. Con el anuncio de Bush de colonizar la Luna volvemos de nuevo con este tema, más propio, para algunos, de la ciencia ficción que de formar parte de los hitos más importantes del siglo XX.

Desde hace varios años, circulan teorías de que el alunizaje de estos astronautas fue un montaje promovido por la agencia con el fin de mostrar su superioridad en la carrera espacial frente a los rusos y seguir recibiendo importantes partidas del presupuesto, y que las imágenes en directo que vieron millones en todo el mundo fueron rodadas en un escenario en Nevada. La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) de Estados Unidos ha manejado, sin mucha fanfarria, la polémica por décadas, pero Roger Launius, ex historiador jefe de la NASA, dijo que las dudas se intensificaron en el 2001, cuando la cadena de televisión Fox transmitió el programa "Teoría de la conspiración: ¿llegamos a la Luna?".

Este programa dio más armas a los escépticos, cuyos argumentos se extendieron por la Internet e incluso han engendrado un reacción de los científicos quienes ven los argumentos de los dudosos como algo simplemente ridículo La Nasa quiere poner fin a la historias Cansados de estas teorías conspirativas, la NASA decidió encargar, en noviembre del 2002, a James Oberg (un reconocido escritor de temas del espacio y colaborador de la agencia espacial) la producción de un libro que se espera que acabe con los rumores. Sin embargo, pocas noticias se tienen sobre este ejemplar y a pesar del tiempo transcurrido en el site oficial de Oberg no figura ninguna mención a esta obra.

Otra iniciativa de la que también se informó en su momento es la promovida por la compañía privada, Transorbital. Esta consistiría en la puesta en orbita de un satélite de alta resolución alrededor de la luna para mostrar los restos del Apollo que se quedaron en la superficie de la Luna. Tras la perceptiva autorización de la Administración USA, esta firma lanzó su primer satélite en julio del 2003 y tiene previsto completar su misión en breve.

Fuente de la NASA, dudan sin embargo que tanto el libro prometido como las purebas que pueda aportar Trailbazer convenzan a los escepticos.

"Sabemos que hay grupos de personas, individuos, que nunca se van a convencer de algo como esto. Ese no es el público",
dijo el ejecutivo de la NASA, Launius. Añadiendo que "El público son aquellos quienes vienen a la NASA, buscan información y obviamente ellos harán sus propios juicios, pero trataremos de poner la mejor información posible en sus manos".

Los lectores de esta publicación podrán conocer ampliamente las diferentes hipótesis en estas mismas paginas, algunas de ellas surgidas de películas de ciencia ficción y otras por científicos que equivocaron su carrera, con un futuro prometedor en Hollywood, mucho más que en los centros de enseñanza o de investigación a los que han dedicado su vida. Sin embargo, Ud. mismo podrá juzgarlas y tomar su opinión sobre el tema.

La locura y el afán publicitario de algunos de los escépticos no tiene límites

El 9 de septiembre del 2002, Bart Sibrel, director de la película A Funny Thing Happened On the Way To the Moon, se enfrentó al astronauta Buzz Aldrin en un hotel de Beverly Hills, demandandole que jurara sobre la Biblia de que en realidad había caminado en la luna. Aldrin, de 72 años, el segundo hombre en tocar la superficie lunar, golpeó en la cara a Sibrel, de 37 años, lo que le permitió presentar una demanda contra el astronauta que fue rehusada por los fiscales del condado de Los Angeles. Un vídeo del incidente mostraba a Sibrel siguiendo a Aldrin en la calle con una Biblia y llamándole "ladrón, mentiroso y cobarde", dijo un fiscal.